En León, el comercio informal comienza a transformarse. Más de 80 comerciantes que antes operaban sin permisos en Miguel Alemán han sido reubicados en Línea de Fuego. Este paso representa un avance hacia un comercio con reglas, digno y sostenible.
Del desorden a la oportunidad
La regularización de estos comerciantes no solo liberó una de las avenidas más transitadas de León. También les abrió la puerta a una nueva etapa con respaldo legal y acompañamiento institucional.
Hoy, Línea de Fuego los recibe como parte de su comunidad. De acuerdo con líderes de este espacio, los vendedores reubicados han demostrado responsabilidad y respeto al reglamento.
“Queremos disciplina y compromiso, y ellos han respondido”, expresaron desde la administración del tianguis.
Comercio con reglas: Integración sin distinciones
Lejos de marginarlos, los nuevos locatarios reciben el mismo trato y acceso a beneficios que el resto de los comerciantes establecidos. Ya no trabajan al margen, sino dentro de un espacio ordenado, seguro y con respaldo de la autoridad municipal.
El proceso también es un mensaje claro: si hay alternativas para quienes deciden regularizarse. Solo se exige disposición para cumplir normas básicas que garanticen el buen funcionamiento del comercio local.
Una ciudad con reglas y oportunidades
Desde Línea de Fuego, se sigue invitando a comerciantes informales a acercarse. Los líderes aseguran que hay canales abiertos con la Dirección de Comercio y Consumo, y que el diálogo y la colaboración son el camino.
El objetivo es claro: un León con orden, legalidad y oportunidades reales para quienes viven del comercio. Transformar el ambulantaje en comercio con reglas es una apuesta por una ciudad más justa para todos.
