El Dr. Gabriel Cortés Alcalá, secretario de salud, instó a la población a evitar el uso de juegos pirotécnicos en las fiestas de Año Nuevo, destacando los graves riesgos que implican, especialmente para niños.
Pirotecnia: una tradición peligrosa
Durante las celebraciones decembrinas, el uso de pirotecnia incrementa significativamente los accidentes relacionados con quemaduras. Según el Dr. Gabriel Cortés Alcalá, las lesiones por pirotecnia aumentan entre un 7 y un 15% en diciembre. Los menores son los más vulnerables, ya que carecen de la destreza necesaria para manipular estos productos, enfrentando riesgos que van desde quemaduras leves hasta amputaciones.
“Los juegos pirotécnicos contienen pólvora, y en algunos casos, dinamita, lo que eleva el riesgo de accidentes graves. Las lesiones pueden afectar la cabeza, ojos, manos, piernas y abdomen”, explicó el funcionario. Incluso las luces de bengala, aparentemente inofensivas, pueden provocar quemaduras severas. Una sola chispa podría incendiar la ropa, causando daños graves en la piel.
Tipos de quemaduras y prevención
Existen tres grados de quemaduras que pueden derivar del uso de pirotecnia:
- Primer grado: Afectan la capa externa de la piel, causando dolor, enrojecimiento e hinchazón.
- Segundo grado: Impactan las capas externas e internas de la piel, provocando ampollas y dolor intenso.
- Tercer grado: Dañan las capas más profundas de la piel, dejando marcas severas y, en algunos casos, insensibilidad.
El secretario enfatizó que la única forma segura de prevenir estos accidentes es evitar el uso de pirotecnia. Además, recomendó a los padres mantener vigilados a los menores y optar por alternativas más seguras para celebrar las fiestas.
La Secretaría de Salud reitera su compromiso de proteger a las familias mexicanas y hace un llamado para disfrutar de un Año Nuevo libre de riesgos.
